Este capítulo proporciona los lineamientos técnicos necesarios para asistir al productor en el manejo de los diferentes puntos críticos al inicio del ciclo productivo de la trucha arcoíris.
El componente humano es sin duda una parte muy importante del manejo adecuado de las ovas. El personal de la planta de incubación con una formación técnica exhaustiva puede tomar medidas rápidas para hacer frente a cualquier contratiempo que pueda surgir durante el proceso de manipulación de las ovas.
Los materiales y equipos deben lavarse y desinfectarse antes y después de su uso en la recepción de ovas. Estos desinfectantes deben ser para acuicultura y respetuosos con el medio ambiente (amoníaco cuaternario o yodo orgánico). Se deben seguir las instrucciones del fabricante. Estos materiales y superficies deben enjuagarse bien antes de usarlos directamente sobre las ovas.
El monitoreo de la calidad del agua es muy importante durante todo el ciclo de producción de la trucha y requiere mucha atención. Es clave conocer los momentos del día y/o estación en los que se tiene una mejor calidad del agua, ya sea en temperatura, oxígeno disuelto u otros parámetros. El monitoreo se puede realizar con equipos simples como termómetros o equipos más complejos como dispositivos multiparamétricos. Esto le permitirá saber cómo cambia la calidad del agua durante el día y durante el período de tiempo histórico de la granja.
Las instalaciones deben revisarse con anticipación para asegurarse de que estén en óptimas condiciones sin importar si el criadero es una gran industria o una pequeña granja. Lo importante es que el sistema esté sanitario y en correcto funcionamiento. El flujo de agua debe ser el esperado y sin fugas de agua u ovas. Las incubadoras deben tener las dimensiones adecuadas que permitan un manejo adecuado de la densidad de ovas planificada, con un flujo de agua óptimo y la posibilidad de una adecuada limpieza y extracción de desechos.
Materiales para recibir ovas:
Una vez que las ovas llegan a la ciudad o país importador, deben ser revisados cuidadosamente por un representante de la empresa importadora. Se deberá informar cualquier irregularidad en su recibo, así como la hora y condiciones en que se recibió.
Para el transporte a la planta de incubación, las cajas de envío deben estar en posición vertical y en buenas condiciones. Desde la recepción en el aeropuerto hasta la llegada al criadero, la carga debe ser responsabilidad del importador. El transporte debe ocurrir en el menor tiempo posible en camiones o contenedores refrigerados para preservar la temperatura de las ovas dentro de las cajas de envío.
El Viaje: